En toda la novela hay un elemento que recurre: la idealización del mundo por Don Quijote.
Él tuerce la realidad para
reconstruir el mundo de ideales y valores de la caballerìa. El idealiza todo
lo que ve :
su viejo caballo es
el mejor del mundo
la posada es
un castillo
el
pìcaro le parece el dueño de una fortezza
la campesina Aldonza Lorenza para él es la princesa
del Toboso.
(Otros tres ejemplos: I, II,
III)