LA
EDAD DEL ORO :
Ø
Fundamental
como resumen de todos sus ideales, es el discurso sobre la edad del oro tenido
por don Quijote en el capitulo XI de
la primera parte: dirigiéndose a unos cabreros, él canta una sociedad ideal,
utópica y al mismo tiempo hace una severa crítica de la realidad: según él
existía un tiempo, una “dichosa” y “santa” edad, en que la gente podía vivir en
“paz”, “amistad”, y “concordia” porque todas las cosas eran comunes y los
hombres “ignoraban estas palabras de tuyo y mío”, el amor era simple y
inocente, no existía el engaño o la malicia, sino había honestidad y justicia,
todo el contrario de su época. El añade que con el pasar del tiempo creció la
malicia y se instituyó la orden de los caballeros andantes para defender a los
debiles, socorrer a los menesterosos y luchar contra las injusticias.
Ø
El
tema de la edad del oro comparece también en el capitulo XX de la Primera Parte: para convencer Sancho que él tenía que afrontar esta nueva
aventura, le dice: “Sancho amigo, has de saber que yo nací, por querer del
cielo, en esta nuestra edad de hierro, para resuscitar en ella la de oro, o la
dorada, como suele ser llamada.Yo soy aquel para quien están guardados los
peligros, las grandes hazañas, los valerosos echos. Yo soy, digo otra vez, quien
ha de resucitar los de la Tabla Redonda, los Doce de Francia, […]con toda la
caterva de lo caballeros andantes del pasado tiempo, haciando eb este en que me
hallo tales grandezas, estrañezas y fechos de armas, que escurezcan las más
claras que ellos ficieron...”.